Alumna tesista del Campus Los Ángeles valoró experiencia en Brasil e invitó a sus pares a postular a becas de movilidad

La estudiante retornó llena de experiencias y aprendizajes que la motivaron a buscar nuevos desafíos.

Bárbara Arias Godoy vio en el área de las ciencias y la investigación un camino que llamó su atención, por lo que decidió estudiar Ingeniería en Biotecnología Vegetal en el Campus Los Ángeles.

En sus propias palabras “yo veía que había muy pocas mujeres en el área de la investigación y me interesé en entender qué significaba estudiar ciencias. Eso me gustó, ya después me empecé a animar, a conocer las áreas en las que me podía desenvolver y comprender que era muy amplio, y eso me gustó más y estoy enamorada de la carrera”.

Fue así que avanzó en sus estudios, llegando a la última etapa de la vida universitaria, que es la realización de la tesis. En ese proceso, su profesora a cargo, Angela Machuca, le comentó la posibilidad de postular a la beca de movilidad bajo el marco del UCO 1966 ofrecido por UdeC, lo que hizo nacer en ella el sueño de viajar al extranjero.

Para lo anterior había requisitos que ella cumplía, como cursar hasta tercer año con las materias aprobadas, un promedio sobre 5, y tener un currículum con proyectos como participante, y también asistencia a congresos.

Cuando Bárbara recibió la noticia de que se había adjudicado el beneficio, fue una total sorpresa. “Fue emocionante porque yo no pensé que iba a ir al extranjero, era un sueño para mí, pero ya pensando en un doctorado, es decir más adelante, y hacerlo ahora fue abrir mi mundo a posibilidades que antes no creía posibles”.

Su paso por la Universidad de Sao Paulo, en Brasil, le entregó diferentes desafíos. El primero de ellos el lograr comunicarse, ya que se fue con conocimientos casi nulos del idioma. Sin embargo, aquello no fue una excusa, y utilizó herramientas digitales que poco a poco le ayudaron.

También recibió consejos de su docente, quien la orientó sobre cómo poder comunicarse al no saber portugués. Pero el paso del tiempo le entregó la facilidad de entender, y también poder expresarse, afirmando que con solo dos meses el idioma le salía con naturalidad.

Tras su regreso a Chile y al Campus Los Ángeles, Bárbara quiso motivar al resto de las y los estudiantes a atreverse con estas oportunidades, afirmando que “esta experiencia fue de aprendizaje tanto personal como académico. En lo académico aprendí mucho porque las técnicas de biotecnología que se manejan allá son totalmente diferentes a lo que se ve acá, y aprendí a hacer muchas cosas por mí misma, y eso me ayudó a probarme que podía hacer cosas que antes no creía posible. Así que solo les puedo invitar a que averigüen, pregunten, y postulen. Y si quedan, que se entreguen a la experiencia, a conocer y a aprender”.

La alumna estuvo además compartiendo con los nuevos alumnos y alumnas de este 2024 en su misma carrera, ya que fue invitada a un desayuno de bienvenida, donde les pudo contar su experiencia a esta nueva generación de futuros profesionales.

Ante esto el jefe de la carrera de Ingeniería en Biotecnología Vegetal, Pedro Quiroz Hernández, dijo que “la idea es socializar y darle un carácter más afectuoso a esta transición del colegio a la universidad, para que así lo sientan más cercano. Además, el que estuviese Bárbara era para que se sentaran al lado de ella, la conocieran, y comprendieran que ella un día llegó como ellos y que sus capacidades y constancia la ayudaron a este gran desafío”.

Mientras que la encargada Equipo de Movilidad y Convenios DRI, Christelle Pierre, agregó que “la posibilidad de internacionalizar el currículo como lo es realizar una movilidad presencial brinda la oportunidad única a los estudiantes de desarrollar aptitudes y perspectivas globales, incorporar nuevas técnicas para los desafíos locales y así también fortalecer su perfil de egreso. Además, el socializar estas experiencias tan valiosas, como la que vivió Bárbara, permite incentivar a otros estudiantes a atreverse a vivir una movilidad”.