Campus
Catherine Pincheira Baeza
Junio 14, 2022
En pleno desarrollo se encuentra el programa de propedéutico, a cargo de la Escuela de Educación del Campus Los Ángeles, el que busca desarrollar el talento pedagógico de estudiantes secundarios para que puedan ingresar a las carreras de pedagogía a de nuestra universidad. En este sentido, los relatores de la universidad trabajan un eje vocacional y un eje de herramientas pedagógicas y de esta manera desarrollar competencia intra e interpersonales que preparen a los participantes del programa a un mejor desenvolvimiento en su paso universitario y en el ejercicio docente.
Es en este contexto, que quisimos conocer los testimonios de estudiantes que actualmente se encuentran ad portas de egresar de la enseñanza secundaria y son desde el año pasado, parte del programa.
EXPERIENCIAS
Uno de estos testimonios es el de Kassandra Mendoza Jara, del Liceo Bicentenario Valle de Sol, Quilaco.
“Me interesó estudiar pedagogía en el año 2019, en aquel entonces cursaba 1ro medio, tenía un profesor que no me gustaba como impartía sus clases porque era muy autoritario, siempre quería tener el control absoluto de lo que ocurría dentro de la sala de clases, no se interesaba por el aprendizaje de todos los alumnos, sus clases no nos motivaban y lo único que queríamos era que tocara el timbre para salir. Un día me dije a mi misma “no quiero que nadie más se sienta como yo me sentí con un profesor así, quiero hacer un cambio”, y, tal vez no pueda hacer que todos los profesores cambien su manera de pensar o actuar, pero el solo hecho de poder hacerlo yo, me voy a sentir orgullosa”.
“Mi experiencia en el propedéutico ha sido maravillosa, el poder conocer gente nueva con los mismos intereses que yo, el poder compartir con ellas es simplemente genial, hay una buena convivencia en la sala de clases, existe demasiado respeto entre los estudiantes, desde los estudiantes hacia los profesores y viceversa, el poder aprender un poco más sobre lo que significa ser un docente nos va a ayudar mucho en un futuro cercano”.
“Por eso invito a todos aquellos alumnos que quieran estudiar alguna carrera en el área de pedagogía que se inscriban en el propedéutico, les aseguro que les va a ayudar muchísimo a desarrollar habilidades académicas, sociales y actitudinales, además de los beneficios que tiene a la hora de ingresar a la universidad”.
David Escobar Sánchez, Liceo Bicentenario A-59, Los Ángeles.
“Este Propedéutico llegó a mi vida en un punto en que me encontraba próximo a cumplir los 17 años. Varias eran las dudas sobre mi futuro. No tenía claridad sobre qué era lo que realmente quería estudiar y a medida que mi tercero medio se agotaba, sentía cada vez más la presión del mañana sobre mis hombros. Todo cambió cuando llegó de parte de mi profesora jefe la invitación que hacía la UDEC a los interesados en la pedagogía para unirse a este programa, que prometía dar formación gratuita a futuros docentes. Algo hizo click dentro de mí. La idea de ser profesor ya llevaba dando vueltas en mi cabeza desde hacía ya un buen tiempo. Deseaba seguir el ejemplo que tantos buenos docentes me dejaron, y transmitir a un público mis conocimientos y mi pasión por la historia. Solo la desconfianza sobre la viabilidad misma de la carrera y el estigma que percibía se armaría en mi contra por elegirla me habían mantenido fuera de soñar con dedicar mi vida a la enseñanza. Sabía que una gran oportunidad se había presentado ante mis ojos y la tomé. Ya había cumplido los 17”.
“Sigo este camino siendo consciente de los grandes retos que se me vienen encima y de las relativamente escasas compensaciones que las esforzadas personas de este rubro reciben. Se que a hombros de las futuras generaciones de docentes queda el transformar la visión que la sociedad chilena tiene de aquellos que ejercen tan fundamental labor”.
Elena Maldonado Elgueta, Liceo Bicentenario A-59, Los Ángeles.
“Creo que siempre tuve el deseo de ser profesora, desde que veía a mi hermana mayor, mi modelo a seguir, dando clases en escuelas, supe que quería ser como ella, aunque suena como solo un sueño de niña, con el paso del tiempo, cada casualidad de la vida me está dando la oportunidad de cumplir aquel deseo”.
“Gracias al propedéutico puedo decir que he encontrado mi vocación, con cada una de las actividades más me voy encantando de la pedagogía, tuve la oportunidad de escuchar de distintos profesores su experiencia siendo docente, me empapé de conocimiento y sabiduría, puedo decir firmemente que esto es a lo que me quiero dedicar. Es un trabajo muy esforzado y noble, creo que no se le da la importancia que merece, me encantaría poder hacer el cambio, quiero dejar una huella en esta profesión y ayudar cuánto más pueda a los demás, ser un aporte a la sociedad y de a poco ir mejorando la profesión docente, creo que aún hay muchos cambios que hacer para progresar y me encantaría estar en ellos”.