opinión
Francisco Javier Parada Barriga
Junio 28, 2022
Internet se pensó como una red con la cual se pueden compartir archivos o datos sin preocuparnos de la distancia, o de los costos. A lo largo del tiempo fue evolucionando a lo que hoy conocemos como Internet, una red donde se puede encontrar casi todo en la palma de nuestra mano a un solo clic (siempre y cuando sepamos buscar).
Internet nos entregó, la creación de comunidades que se congregaban en foros de conversación basado en un tema en particular. Los chats, el inicio de las redes sociales, eran app de chat entre usuarios de todo el mundo con solo hacer clic en aplicaciones como mIRC y MSN. El poder compartir archivos mediante una aplicación de descarga como eMule, Kazaa y el famosos BitTorrent. A la vez, vivimos el nacimiento de la “era” de las redes sociales, con el inicio de Facebook, Instagram y hoy TikTok, esta última sube día a día la cantidad de usuarios que interactúan.
Spotify, la aplicación de uso diario para escuchar podcast y música, inició en el 2008 con cuentas gratuitas, integrando comerciales entre canciones o cierta cantidad de minutos, al igual que YouTube el sitio donde vemos videos de todo tipo desde el 2005, el cual es gratis, “pero” con publicidad, ambas plataformas, han servido de ejemplo para cadenas de streaming como Netflix y Disney, las que buscan aumentar sus suscripciones, que este último año van a la baja debido a sus valores, competencia y la resurrección de los portales de streaming piratas. La estrategia es implementar la opción de una suscripción con publicidad en ciertos momentos del streaming, es decir similar a YouTube Free.
La mayoria de las acciones que hacemos en internet, generan una “huella digital” de nuestros datos, utilizados por empresas para poder conocer gustos y así generar un perfil de usuario, usado por nuestra aplicación de correos electrónicos, redes sociales, las cuales nos invaden con publicidad o spam.
La publicidad es uno de los principales negocios que genera internet, debido a la gran cantidad de “datos” que subimos los usuarios diariamente. “Internet”, puede conocer todo tus gustos, informaciones personales, marcas favoritas, etc., estos antecedentes se guardan en los servidores de las distintas aplicaciones como; redes sociales, páginas web o correos, son usados en “bigdata”, empresas que compran estas grandes bases de datos, con lo cual se apoderan de toda la información que hemos proporcionado a las aplicaciones de uso diario, como; nuestros gustos, color favorito, fecha de cumpleaños, mascota, marca de auto, edad, ubicación de residencia/trabajo/diversión georefenciado, serie/película favorita, y muchos mas, así la aplicación o sitio web “conoce” del usuario que lo visita, y con esos datos puede ofrecer o dirigir el tipo de publicidad que te pueden interesar.
Es por esto, que considerando que la publicidad llegó para invadir Internet, tenemos que pensar en la seguridad de la información que tenemos en la nube, preocuparnos de no compartir todos nuestros datos, o asumir la consecuencia.