opinión
Gerardo Erices Arriagada
Julio 5, 2022
La pandemia limitó la alfabetización inicial, más aún en escolares de alta vulnerabilidad social, a pesar de los constantes esfuerzos del profesorado con el APTUS.
Queríamos considerar la cultura del estudiantado, optamos por el enfoque equilibrado versión Lagos (EEL), para que un 2° básico se motivara por leer y aprendiera a leer y a escribir textos breves, incrementara su vocabulario y la conciencia lingüística y la lectura oral, en 16 sesiones semanales continuas de 60 minutos: 30 minutos de actividades participativas e interactivas de lectura placentera para desarrollar la motivación por leer a todo el curso y luego 30 minutos de trabajo docente focalizado en el los que no lee ni escribe.
El (EE-L) facilita la interacción docente- aprendiz, la mediación efectiva del docente e incorpora actividades que desarrollan las funciones lingüísticas básicas: hablar, escuchar, leer, escribir y producir textos auténticos; se focaliza en la motivación lectora (lectura placentera), comprensión lectora (implícita-inferencial-causa/efecto), lectura (texto atingentes a su cultura), producción de textos (invención y escritura de textos breves), dominio de la escritura (dibujo libre y guiado, ejercicios grafomotrices, transcripción de palabras y de oraciones breves y caligrafía con palabras y frases del texto), conciencia metalingüística (producción de rimas, reconocimiento de palabras, sílabas, discriminación visual y auditiva de sonido inicial, intermedio y final), comunicación oral (comentar, conversar, dramatizar), vocabulario -amplio y variado- (Lagos, I., 2003; Lagos., I. et al., 2015).
El EEL incluye el acceso dual: el léxico y el fonológico. El acceso léxico considera la identificación de palabras familiares que forman parte del texto. El acceso fonológico ocurre a través de actividades que facilitan el desarrollo de la conciencia fonológica, discriminación visual y auditiva de palabras, de sonido inicial o final, encontrar sílaba inicial, intermedia o final en una palabra, extraer otras palabras en una más extensa, encontrar palabras que rimen. Implica relacionar fonema y grafema, trabajar pares mínimos; conciencia morfológica y sintáctica: trabajo intuitivo de concordancia de sustantivo y adjetivo, de verbo y sujeto; conciencia semántica: se representan las palabras del texto en ilustraciones apropiadas al sentido del texto, se enseña con buenos ejemplos el significado funcional de las palabras de vocabulario antes de leer el texto, posterior a la lectura, se ejercita el vocabulario mediante su uso en oraciones.
Los seres humanos necesitan desarrollar la motivación lectora desde la temprana infancia y la conciencia lingüística (fonológica, léxica, morfológica, sintáctica), la comprensión de textos, que primero es auditiva; ver valorados sus conocimientos previos, conocimiento de mundo que necesita ver y sentir representado en sus textos y tiene Zonas de desarrollo próximo, que requiere una mediación docente intencionada y sistemática.
Desde el inicio del proceso, los y las escolares producen oralmente textos breves, apoyados en dibujos, ante los que formulan hipótesis que luego verifican con la ayuda docente, escuchan la lectura oral y participan en la conversación en que se plantean 2 a 3 preguntas interesantes, donde ellos infieren con sus conocimientos previos en interacción con el texto. Luego están las actividades para desarrollar la conciencia lingüística, que se basan en ese mismo texto.
Cada participante necesita ser acogido(a) en el desarrollo de las diversas actividades, sentir que su cultura es importante, ser reconocido(a) en su progreso o esfuerzo y compartir sus productos con sus pares y con quien guía la enseñanza, como los textos que producen.